Vivi siempre en un "pueblo". Casa con gran parque y pileta. Ahora me mude a un dos ambientes cuyas dos ventanas dan a huecos internos.
Entre tanto a lo que me tengo que acostumbrar esta el hecho de los vecinos, ni bien me mude escribi un texto que se llamaba "La vida de los otros", eso de escuchar vidas ajenas me era completamente extraño. Al principio, cuando sonaba algun telefono tardaba en darme cuenta si era el de mi departamento o no, lo mismo paso con el timbre. Fue raro sentir olor a comida de los otros hogares, escuchar conversaciones, peleas, musicas y televisores ajenos.
Andar saludando por los pasillos y en el acensor me causaba gracia y simpatia. Me tuvieron que explicar como sacar la basura y me entere que tambien pasa gente pidiendo por los edificios. Me hice amiga del portero y aprendi que no es posible escuchar musica a todo volumen a toda hora.
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El titulo "El arte de Valerse por uno mismo" me encantó, son algo así como los titulos de Fromm, "el arte de amar" o el "arte de escuchar", un arte... definitivamente me encantó tu blog.
ResponderEliminarMuchos saludos.
Srta Esmeralda: Espero que su felicidad continue, y que no se deba solamente al Wonder Boy.
ResponderEliminar¿Me cuenta mas acerca de sus vecinos?
Beso y abrazo
Pable
Fer:) : gracias!
ResponderEliminarPable: sigo contenta porque oficialmente me quedan 38 materias, porque el wonder boy me hace vovler a mi infancia (NO TAN LEJANA EN REALIDAD) y porque pase la tarde con mis amigas y eso me hace feliz. De los vecinos sabra mas en el proximo capitulo... ajaj
beso enorme